Angustiado por el inminente divorcio de sus padres y esperando que le ayude a despejar su cabeza, el joven Ben (John-Paul Howard), decide visitar a su padre durante el verano. Pronto se da cuenta de los horrores que están ocurriendo en su misma calle. Un mal centenario está aterrorizando a la joven familia de la casa de al lado. Escondido entre los árboles cercanos, y pronto residiendo en el interior de la madre de la familia, el mal empieza a atacar a los niños del pueblo. Ben intenta conseguir ayuda, pero nadie parece creerle. Si quiere salvar al pueblo, tendrá que hacerlo solo de algún modo.